Cultivo sin Suelo de Hortalizas
S è r i e D i v u l g a c i ó T è c n i c a
3•2•1•5 Agua total disponible
Viene dada por la suma del agua fácilmente disponible más el agua de reserva.
Nivel óptimo se encuentra entre el 24 y el 40% de volumen.
3•2•1•6 Agua difícilmente disponible
Es el volumen de agua retenida por el sustrato tras ser sometido a una tensión superior a 100 cm. columna de agua. En muchos casos se produce una incapacidad por parte de la planta de extraer el agua del sustrato, pudiendo llegar incluso a mostrar síntomas de marchitez.
3•2•1•7 Distribución del tamaño de las partículas
Hemos visto como el tamaño de los poros determina la capacidad de un sustrato en retener el agua y el aire. La porosidad aumenta en la medida que lo hace el tamaño medio de las partículas.
Las partículas pequeñas hacen disminuir la porosidad y aumentar la cantidad de agua retenida. En un sustrato, es también importante la distribución del tamaño de sus partículas.
El material más adecuado es el de textura media a gruesa, con distribución de tamaño de los poros entre 30 y 300 micras, que retiene suficiente agua fácilmente disponible y posee un adecuado contenido de aire.
3•2•1•8 Estructura estable
Que permita una buena durabilidad del material y una manipulación adecuada.
3•2•1•9 Densidad aparente
Viene definida como la materia seca en gramos contenida en un centímetro cúbico de medio de cultivo. Los sustratos con valores bajos de densidad aparente son fáciles de manipular.
3•2•2 Propiedades Químicas
Hemos visto que los sustratos que más se están utilizando en los sistemas de cultivo sin suelo para el cultivo de hortalizas, son aquellos que tienen una baja actividad química y que por lo tanto, apenas interfieren en la solución nutritiva aportada.
En principio la inactividad química es algo deseado en un sustrato, también lo es el que no se disuelva y por lo tanto, que sean estables químicamente, que presenten una baja o nula salinidad, pH neutro o ligeramente ácido y una adecuada relación C/N.
3•2•2•1 Capacidad de intercambio catiónico. C.I.C.
Se define como la suma de cationes que pueden ser adsorbidos por unidad de peso del sustrato, es decir, la capacidad de retener cationes nutrientes e intercambiarlos con la solución acuosa.
Una CIC alta es propia de los sustratos orgánicos. Se expresa en miliequivalentes por unidad de peso o volumen, meq/100 g. o meq/100 cc.
En los actuales sistemas de cultivos sin suelo, en los que con la nueva tecnología existente en el riego permite formular de forma cómoda las soluciones nutritivas, suele interesar sustratos con una baja CIC, o sea, que sean químicamente inertes o de muy baja actividad.
3•2•2•2 Disponibilidad de los nutrientes
La mayor parte de los sustratos inertes existentes poseen un contenido de nutrientes inicial casi nulo.
Cuando hemos elegido un sustrato orgánico como medio para desarrollar nuestro cultivo sin suelo, será conveniente realizar un análisis del extracto de saturación, para ajustar la solución nutritiva, al menos durante las primeras semanas de cultivo. Como ejemplo tenemos la fibra de coco que inicialmente puede ser rica en potasio.
Fuente: Cultivo sin Suelo de Hortalizas
S è r i e D i v u l g a c i ó T è c n i c a
Carlos Baixauli Soria
José M. Aguilar Olivert
Aspectos Prácticos y Experiencias
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